Memorabilia, iconografías mecanografiadas, cajas chinas, muñecas rusas, recetas, hipertexto culinario y del otro, origamis mentales, hagiografías paganas.

martes, febrero 07, 2006

Dedicado a los que me llaman a horas insolentes para preguntarme dónde ir

"Quizás este texto merezca una aclaración. Los que me conocen saben que me encantan los bares y soy de los que ha perdido harto tiempo en ellos. Debería escribir -a lo Fuguet- algo así como "los bares de mi vida", una recolección intimista y vagabunda de periplos reales, imaginados, en soledad y compañía, en estos establecimientos. Ya lo dije, me encantan los bares, y debe ser porque toda mi adolescencia la pasé en mi casa, en autos estacionados, en sitios eriazos. Como no vivía con mis papás, mi casa se transformó en el maldito centro de reunión de mis amigos durante los últimos años de colegio. Por eso quizá apenas cumplí dieciocho, me dio por ir a descubrdir los surreales y a veces deprimentes bares de Valparaíso. A veces siento que toda mi vida me he preparado para trabajos como los que me encargan ahora en Wikén. Debería decir, también, que salgo a cenar religiosamente, con mi mamá, casi todas las semanas desde los tres años. Yo y ella, vaya dupla, pero eso es otra historia y este bonus track es para los que ya se tomaron la molestia de ver mi trabajo en tinta y roneo. Ahora creo que los estoy aburriendo y como todo lo que presiento se cumple..."

Bares Para Todos

El bar de la esquina, el perfecto para tomar buena cerveza, el ideal para ir con los amigos, el pintado para ir en pareja, el glamoroso, el con onda, el vintage y el de moda... ¿Será posible darles en el gusto a todos? Al menos aquí va un intento.


Wikén, Viernes 27 de enero de 2006.